La Orden Masónica Mixta Internacional Le Droit Humain llegó al Paraguay en 1920 e instaló una logia pionera en la ciudad de Villarrica, según el anuario internacional de 1922 publicado por la organización internacional citado por el antiguo Gran Maestro Mac Grosjean en uno de sus libros.

Debido a las dificultades políticas y sociales esa iniciativa no pudo prosperar sino hasta 2002 cuando se vuelve a instalar en Asunción la pionera Logia Estrellas del Sur, de la mano de distinguidos intelectuales y personalidades comprometidas con el desarrollo social, con el apoyo del Supremo Consejo de la Orden, que entregó la Carta Constituya a la logia.

Hacia la década del 80 del siglo pasado, recibían en la sede del Supremo Consejo de París, con cierta frecuencia y mucho afecto, la visita de Ramona Bertoni, paraguaya exiliada e iniciada en Le Droit Humain en Argentina durante la dictadura de Stroessner y firme defensora de los principios que animan Le Droit Humain.

Bertoni confiaba que un nuevo tiempo se iba a abrir en Paraguay y que Le Droit Humain debería tener en él un papel de relevancia en la nueva construcción social, ayudando a la nueva sociedad paraguaya y poniendo en valor sus ideales fundacionales de libertad, igualdad y fraternidad.

Ramona Bertoni comenzó con ahínco la labor de preparar las primeras piedras para la constitución de una nueva logia de Le Droit Humain en Asunción, formando candidatos, haciendo público el ideal a través de entrevistas, discursos, conferencias, sentando las firmes bases de la primera logia después del advenimiento de la democracia: Estrellas del Sur.

En 2008 la logia pionera Estrellas del Sur dio nacimiento a las logias Georges Martin en Encarnación, y Luz Interior en Ciudad del Este, expansión institucional que posibilitó el establecimiento de la Jurisdicción Paraguaya, segundo eslabón de desarrollo organizacional que ofrece Le Droit Humain a sus miembros radicados en un país.

Fruto de aquella expansión como consecuencia del compromiso iniciático institucional en 2017 la Jurisdicción paraguaya, por entonces ubicada entre las tres primeras organización con mayor cantidad de miembros en el mundo de Le Droit Humain, recibe del Supremo Consejo, autoridad suprema de la Orden, la autorización para formar una Federación, último peldaño de desarrollo organizacional, que otorga plena autonomía a la formación establecida en Paraguay, siempre bajo las normas de la Constitución Internacional de la Orden.

La Federación Paraguaya de la Orden Masónica Mixta Internacional Le Droit Humain es la 14° federación que tiene Le Droit Humain en el mundo, y la 3° en Latinoamérica, luego de Brasil y Colombia. Sus trabajos se desarrollan en todo el territorio de la República del Paraguay, y en la actualidad cuenta con más de un centenar de miembros, entre varones y mujeres que trabajan en igualdad de condición.